Fernández Molina nace como empresa constructora en 1969. Desde sus inicios, la actividad de la empresa se centra en la rehabilitación, construcción y mantenimiento de inmuebles y restauración de monumentos, . La eficacia, solidez y excelencia en la calidad de sus servicios son el sello distintivo de la empresa. Fernández Molina dirige todas sus actuaciones hacia la reducción y prevención del impacto ambiental, prestando especial atención a la protección del entorno y a la innovación. Su compromiso medioambiental y en favor de la eficiencia y sostenibilidad se ha reforzado con la estrecha vinculación a Eneres, empresa del grupo, líder en eficiencia en edificación. Eneres asume además el compromiso de establecer y evaluar de forma periódica el cumplimiento de los objetivos.