Solimat nació el 16 de abril de 1933 como consecuencia de la unión de varios empresarios toledanos comprometidos con la seguridad de sus trabajadores. A principios de los años 90 inició su expansión en dos sentidos: por un lado, mediante la absorción de otras mutuas de las provincias de Madrid y Ávila, y, por otro, ampliando su presencia a todas las provincias de Castilla-La Mancha. En abril de 1997, por exigencia legal, tuvo de cambiar su nombre originario -Seguros Soliss- por Solimat, para desligarse de una forma clara de la compañía de seguros que, al amparo de la mutua, se había creado en los años 30. Fruto del lugar de nacimiento de la entidad y de su expansión por la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha, se distingue como la mutua de esta región. Su diferenciación se centra en la cercanía y compromiso con sus usuarios. La entidad -que ofrece cobertura nacional- está formada por un equipo de más de 200 personas, entre sanitarios y personal de gestión, que ejercen su trabajo en los centros que posee en Castilla-La Mancha, Madrid y Ávila. Su propósito es ser una organización excelente en el cuidado y promoción de la salud de los trabajadores en su ámbito de actuación; reconocida por el compromiso con las personas, con la eficiencia y transparencia en la gestión y la calidad y personalización en la prestación del servicio.