Herederos de una trayectoria jurídica iniciada en 1918, hemos mantenido invariables, a lo largo de los años, los valores fundacionales de nuestro bufete: voluntad de servicio, disponibilidad, conocimientos y formación continuada. La fidelidad a estos principios se transmite en el trato a nuestros clientes, tanto empresas como particulares: el asesoramiento legal preventivo, la defensa jurídica personalizada y el acompañamiento en cada situación que se nos pueda plantear, nos caracterizan como un despacho próximo y de confianza. Nuestro compromiso con la sociedad es también un valor determinante en nuestras actuaciones, por ello intentamos corresponder con un potente y activo departamento de responsabilidad social, suscribiendo convenios de asistencia jurídica gratuita con entidades y organizaciones no lucrativas de ayuda a personas necesitadas. A nuestras áreas de práctica tradicionales hemos incorporado un departamento específico de asesoramiento para clientes franceses y belgas atendida nuestra continua relación con entidades mercantiles de dichas nacionalidades. Además, como despacho tutorial de la Universidad Autónoma de Barcelona, mantenemos un fuerte vínculo con la enseñanza de futuros profesionales.