Desde 1915, en Rafaela Alimentos trabajamos con la misma pasión para ofrecer día a día productos de calidad. Esto nos ha permitido posicionarnos entre los frigoríficos nacionales con mayor trayectoria del país, como también, entre los principales exportadores de carnes enfriadas y congeladas. Contamos con dos establecimientos industriales en las ciudades de Rafaela y Casilda, provincia de Santa Fe. La planta de Rafaela se dedica a la elaboración de fiambres para el mercado interno. Ocupa una superficie cubierta de 70.000 m2 y emplea a un total de 780 personas. También funciona aquí la administración central de la compañía. La planta de Casilda, cuyo objetivo principal es el procesamiento de carnes enfriadas y congeladas para el mercado de exportación, tiene un predio de 19.000 m2 de superficie cubierta en donde trabajan 360 empleados. Nuestros fiambres LARIO son elaborados en base a las recetas originales de la gastronomía italiana. A lo largo de los años hemos desarrollado una completa variedad de productos, entre los que se destacan especialmente los jamones crudos, jamones cocidos, salames y mortadelas. Las etapas de fabricación se llevan a cabo con máquinas de última generación en todas las líneas de productos, que permiten un gran rendimiento sin modificar los estándares de calidad. El equipamiento proviene en su mayoría de proveedores reconocidos internacionalmente, que cuentan con sistemas de calidad certificados. Para la elaboración de todas nuestras líneas de fiambres trabajamos con Sistemas de Aseguramiento de Calidad. Estos sistemas se basan en POES (Procedimientos Operativos Estandarizados de Sanidad), BPM (Buenas Prácticas de Manufactura) y HACCP (Análisis de Riesgo y Puntos Críticos de Control). Finalmente, y gracias a un excelente servicio de distribución con cada cliente, nuestros productos llegan cada día a distintos puntos del país, mayoristas y cadenas de supermercados.