Actualmente somos una de las tres compañías más importantes de minería de oro gracias a una producción que en 2017 alcanzó alrededor de los 3.8 millones de onzas. Nuestras acciones son transadas en las principales bolsas del mundo, lo cual garantiza la transparencia y la supervisión pública global sobre el cumplimiento de los más exigentes estándares internacionales de la industria en materia de capacidad técnica, seguridad y sostenibilidad ambiental, social y económica. Proponemos un modelo de minería bien hecha que tiene como principio fundamental que los impactos que genere la producción de oro sean impactos netos positivos. Es con este espíritu que, desde nuestra llegada a Colombia en 2004, hemos realizado exploración geológica en diversas regiones del país. Contrario a lo que se cree, y aunque ya tres de nuestros proyectos han pasado a un nivel avanzado de exploración, aún no hemos iniciado explotación de minerales en Colombia. Desde las etapas iniciales de exploración, nuestras actividades van más allá de las normativas y se rigen por las mejores prácticas globales en todos los aspectos: técnicos, sociales, económicos y ambientales. Nuestra capacidad para lograr resultados de negocio sostenibles está íntimamente ligada al bienestar del entorno social, económico y natural, tanto en lo local como en la escala global.