La tradición familiar de trabajar el campo, se inicia en 1920, cuando Don Salvador Muñoz Molina, da inicio a la comercialización hortícola. En 1955, Don Salvador, forma su primera sociedad de hecho con su hijo Salvador Andrés, quien inicia adquiriendo tierras propias para la producción en Colonia Santa Rosa (Salta). Posteriormente, en 1983, Don Salvador Andrés, forma su primera sociedad con su hijo mayor Salvador (actual presidente de la empresa), a la que luego, en 1988, se sumaría Miguel (actual vicepresidente de la empresa). En 1993, Salvador y Miguel, junto a su padre, Don Salvador Andrés, construyen “Hijos de Salvador Muñoz”. Nuestro abuelo y padre nos inculcaron valores como el esfuerzo, el trabajo en equipo, el amor por nuestra tierra y la pasión por hacer. Esto son valores que día a día trasmitimos a nuestros colaboradores y los que nos han permitido crecer y posicionarnos hoy como una empresa de alimentos referente de Argentina. “Calidad con nombre propio” es nuestro slogan y lema, el que nos marca el camino para siempre buscar la calidad tanto en nuestros productos como en nuestros procesos. Apostamos a la integración del campo, la industria y la comercialización. Produciendo la materia prima en nuestras fincas, elaborando los alimentos y agregando valor en nuestro complejo industrial, que se compone de una planta procesadora de porotos, una planta de clasificación, selección y empaque de hortalizas, y una fábrica de conservas. Actualmente la empresa cuenta con alrededor de 32.680 hectáreas repartidas entre producción de granos (maíz y porotos de diferentes variedades), frutihortícolas (tales como tomates, pimientos, berenjenas, choclos y bananas) y ganadería (recría y feedlot). A partir de 2005, con la idea de aprovechar la materia prima, se incorporó una fábrica de conservas, con el objetivo de agregarle valor a todo el fresco que se produce en el campo y brindando a la gente de la región una nueva fuente de trabajo.