Es en 1982 cuando se decide formar un colegio laico, mixto con un elevado nivel académico, basado en tres piedras angulares: • La enseñanza de dos idiomas: buscando la integración de los alumnos al mundo • La Actividad Física: Basados en que tanto la actividad deportiva tradicional como la relativa a la vida al aire libre son importantes en el desarrollo de los niños y jóvenes, ya que les crea liderazgo y despierte inquietudes con respecto a la armonía con la naturaleza. • Alta calidad en la elaboración del Plan de Estudios: pilar fundamental para la solidez educacional, entregando las herramientas necesarias para enfrentar el futuro. Sus creadores han velado por generar valores importantes y fomentarlos en cada uno de sus alumnos, sin ningún tipo de discriminación, ni racial, ni política, ni religiosa, siendo importante para que puedan enfrentarse en un mundo heterogéneo, sin aprehensiones ni prejuicios. Coherente con lo anterior, el Colegio ha mantenido una política abierta en cuanto a la recepción de alumnos, entendiendo que cuando un alumno ingresa a nuestro Colegio es para terminar en él su educación escolar. En esa misma perspectiva se estableció como prioritaria la función académica y educativa, considerando al profesorado como un factor muy relevante, procurando contar con profesores de alto nivel y comprometidos con el proyecto.